¿Sabías que los pies están conectados con todos los órganos del cuerpo? Es por eso que la reflexología nos permite actuar sobre ellos y es una forma efectiva de potenciar la salud de todo el organismo.
Al igual que sucede con las manos, la espalda o el pabellón auricular, también en los pies está fielmente representado todo nuestro cuerpo. De hecho, en las plantas de los pies se encuentran cerca de 7000 terminaciones nerviosas que corresponden a cada parte de nuestro cuerpo.
Es lo que se conoce con el nombre de zonas reflejas. Esas zonas son una especie de «espejos» que reflejan en qué condiciones de salud se halla el organismo de una persona en un momento determinado.
La información que nos brindan las zonas reflejas es cuantiosa, pero se ha de tener la capacitación suficiente para saber leerla e interpretarla.
Actuando sobre ellas, mediante técnicas de presión, el terapeuta puede mejorar múltiples dolencias, como cefaleas, migrañas, cistitis, cólicos nefríticos, estrés, cansancio general, etc.
Pero al margen de su carácter curativo, la reflexoterapia podal también es un excelente método de relajación que uno puede aplicarse a sí mismo o a los demás de forma regular para favorecer su bienestar físico.
Además la presión manual ayuda al sistema linfático a eliminar los desechos y hace que la sangre circule con mayor fluidez por todo el cuerpo, favoreciendo el aporte de nutrientes a las zonas que presenten lesiones.
Muchos reflexólogos consideran que la eficacia de esta terapia se basa en su capacidad para reequilibrar la energía de todo el organismo.
¿Cuál es el origen de la reflexoterapia podal?
Aunque la cultura china y egipcia ya la utilizaban, basándose en el principio en el que existe una relación entre la piel y los órganos, no fue hasta los años 30 cuando la reflexología ganó popularidad.
Fue gracias a Eunice Ingham, un fisioterapeuta que trazó un mapa de los pies y sus correspondientes áreas. Un mapa dividido en 10 zonas recorridas por líneas longitudinales que coinciden con el número de los dedos de los pies.
Según su planteamiento, los meridianos conectan entre sí varias partes del cuerpo, por lo que cuando algo no funciona correctamente, los pies se muestran sensibles a la presión en la zona que corresponde.
En definitiva, la reflexología es una técnica de digitopuntura que estimula los puntos reflejos, provocando una respuesta involuntaria en las glándulas y órganos conectados.
Beneficios reflexología
En consulta cada vez más naturópatas utilizan la reflexología entre sus técnicas por los beneficios que tiene:
- Reducción del dolor y de los síntomas de problemas de salud.
- Mejora en el flujo sanguíneo.
- Mejora el estado anímico y favorece un estado de relajación.
- Ayuda a las alteraciones psicosomáticas: insomnio, ansiedad, depresión,
- nerviosismo, estrés, taquicardias, cefaleas…
- Trastornos motores, funcionales o sensitivos.
- Mejora la función nerviosa y los problemas digestivos.
- Incrementa los niveles de energía.
- Fomenta la eliminación de toxinas.
- Reduce los dolores de cabeza.
Además, esta técnica se puede utilizar de forma preventiva para fomentar el equilibrio.
¿Alguna vez has probado la reflexología? ¿Te gustaría implementarla en tu consulta de naturopatía?